A las cinco de la madrugada se inició el devoto acto con sabor auténtico almeriense.
A diferencia del resto de provincias andaluzas, Almería celebra su ‘madrugá’ más auténtica que ninguna otra con el Vía-Crucis con la imagen del Santo Cristo de la Escucha.
Entre rezos y meditación, numerosos almerienses esperaron toda la noche para participar en el piadoso Vía-Crucis, ‘velando’ al Santo Cristo de la Escucha.
Eran las cinco en punto de la madrugada cuando los portadores de las andas, dirigidos por Adolfo Pageo, iniciaron su caminar portando la imagen hasta la fachada principal de la Catedral de la Encarnación, donde el dean de la Catedral dirigió unas palabras a cuantos almerienses esperaban en la plaza el inicio de tan devoto acto.
Los varios miles de asistentes al Vía-Crucis recorrieron la calle Eduardo Pérez y calle Real, donde los jóvenes que disfrutaban en la zona de ocio de las cuatro calles compartiendo espacio con los participantes en tan piadoso acto y con respeto.
Eran las seis en punto de la madrugada cuando las puertas del Santuario de la Virgen del Mar acogieron la IV Estación, Jesús encuentra a su Madre. Estación del Vía-Crucis que dirigió el prior de los Dominicos, fray Antonio Bueno.
Cabe recordar que el almeriense Jesús de Perceval fue el autor de la venerada imagen del Cristo de la Escucha en el año 1941, tras ser destruida en 1936. Copia que pudo efectuar gracias al vaciado que le realizó al primitivo Cristo en el año 1934 y que posiblemente fue ejecutada en torno al siglo XV.
(La voz de Almería)
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