El fotógrafo almeriense se convierte en el primero de España en tener un museo.
Carlos Pérez Siquier (Almería, 1930) vuelve a hacer historia. Tras descubrir al mundo La Chanca a través de una serie mítica, fundar junto a José María Artero el grupo AFAL -que desde mediados de los años 50 revolucionaría el panorama fotográfico español junto a la revista homónima- y recibir el Premio Nacional de Fotografía en 2003, desde hoy será el primer fotógrafo español en tener un museo dedicado a su obra. Un nuevo espacio cultural para la provincia que no solo mostrará sus trabajos a través de una exposición permanente sino que tendrá un archivo con sus fondos que se convertirá en lugar de estudio e investigación para fotógrafos de todo el mundo.
Gestionado por la Fundación de Arte Ibáñez-Cosentino, el Centro Pérez Siquier abre este viernes sus puertas en Olula del Río a las doce del mediodía. En la inauguración participarán Juan Manuel Martín Robles, director de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino y director de los museos de la Fundación; Antonio M. Pascual, alcalde de Olula; Santiago Alfonso Rodríguez, miembro del patronato de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino y Director de marketing de Grupo Cosentino; Luis Lafuente Batanero, director general de Bellas Artes y Patrimonio Cultural del Ministerio de Cultura; y el propio Carlos Pérez Siquier.
“Estoy muy emocionado y agradecido. Jamás pensé que podía llegar a tener un museo en vida”, expresaba ayer a LA VOZ el fotógrafo horas antes de vivir un día excepcional.
Según detalla en un comunicado de prensa la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino, el espacio cultural y museístico comenzó a ser una realidad en septiembre de 2016, cuando Pérez Siquier, mediante contrato de comodato, cedió a la Fundación la totalidad de su archivo fotográfico y la gestión integral del mismo. De forma casi paralela se se inician las obras del centro, situado junto al Museo Ibáñez.
Cinco salas
Las cinco salas del centro muestran “lo más interesante de la obra de Pérez Siquier y lo sorprendente de su evolución estilística”, indican desde la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino.
En la Sala 1, alrededor del prototipo de la monumental escultura ‘Mujer de Coslada’ realizada por Antonio López, se expone la serie ‘La Chanca en blanco y negro’, “mítica serie del documentalismo español de los cincuenta que retrata en clave neorrealista la vida de los habitantes de este barrio almeriense”.
La Sala 2 exhibe ‘La Chanca en color’, “serie de comienzos de los sesenta sobre el mismo barrio que inicia una visión más estética e informalista” en su trayectoria.
Una selección de ‘La playa’, “conjunto de obras de marcada ironía y acento pop sobre el turismo invasor en el Mediterráneo, que le colocó como uno de los pioneros mundiales de la fotografía en color”, ocupa la Sala 3, mientras que la Sala 4 recoge una selección de sus series posteriores sobre ‘Color del Sur’.
Y en la Sala 5, un patio a cielo abierto recoge una síntesis del trabajo más abstracto del autor, “desde las paredes desconchadas de La Chanca de mediados de los sesenta hasta los registros de finales de los noventa tomados en el Cabo de Gata”.
El Centro Pérez Siquier abrirá de forma gratuita mañana y tarde de martes a domingo, incluso festivos. Solo cerrará los lunes y los días 1 de enero, 1 de mayo y 25 de diciembre. Del 1 de octubre al 31 de marzo, el horario de apertura será de 11 a 14 horas y de 17 a 19 horas; del 1 de abril al 31 de mayo, de 11 a 14 horas y de 18 a 20 horas; y del 1 de junio al 30 de septiembre, de 11 a 14 horas y de 19 a 21 horas.
Santiago Alfonso: “Es un sueño cumplido”
Para Santiago Alfonso, miembro del patronato de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino y Director de Marketing de Grupo Cosentino, la apertura del Centro Pérez Siquier supone una “emoción” por ver materializado lo que hasta hace un par de años era “un sueño”. “Con la inauguración de hoy, este proyecto se vea a hacer realidad y va a estar disponible para que la gente lo pueda ver. Para nosotros supone una gran satisfacción por el valor que tiene y lo que aporta a toda la comarca del Almanzora y al conjunto de la provincia”, afirma en declaraciones a este periódico.
Alfonso destaca la importancia de que esta nueva dotación museística y cultural sea la primera que se dedica en España a un fotógrafo. “Además, tenemos la suerte de que Carlos, a sus 87 años y con una salud y con una mente extraordinarias, pueda disfrutarlo en vida. Es una excepcional manera de coronar su trayectoria y de poder ver su carrera de forma retrospectiva”.
Asimismo, desde la Fundación se muestran satisfechos por el deber cumplido. “Estamos felices por haber hecho este sueño realidad pero también sentimos cierto alivio porque ha sido difícil llegar hasta aquí. Son muchos esfuerzos altruistas, de muchas horas y de mucha gente, los que han hecho posible el Centro Pérez Siquier”, desvela.
Así concluye un camino que se inició con la cesión de la obra del fotógrafo a la Fundación, “algo posible gracias a la amistad entre Carlos y Andrés García Ibáñez”. Después se firmó el proyecto para la construcción del centro, “realizado en tiempo récord”.
El Centro Pérez Siquier ha contado con una inversión de unos 400.000 euros que se han sufragado sin ayudas públicas a través de la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino.
(La voz de Almería)
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