Este domingo, a las 03:00 horas serán las 02:00 debido al cambio de hora estacional. Esta medida, que se lleva a cabo a raíz de la Primera Guerra Mundial con el concepto de ahorro de luz diurna, afecta tanto al ahorro de energía como a nuestra salud.Por norma general, el último domingo de marzo y el último de octubre, los países europeos ajustan sus relojes con el objetivo de cumplir la directiva comunitaria 2000/84/CE. Durante 2015, según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía, esta medida supuso un ahorro de cerca de 300 millones de euros
Por lo tanto, la idea de cambiar el horario con el objetivo de aprovechar las horas de luz solar para conseguir un mayor ahorro energético es eficaz pero, ¿cómo afecta a nuestra salud?
La sensibilidad de cada persona es diferente
Por norma general, la mayoría de la población no nota efectos adversos en el organismo puesto que tan solo se atrasa una hora. Sin embargo, y dado que la sensibilidad de cada persona es diferente, es probable que varias personas experimenten consecuencias negativas por el cambio de hora.
Las variables ambientales como la luz o la temperatura pueden alterar el ritmo fisiológico y, por lo tanto, provocar efectos adversos en la sociedad. El cuerpo humano cuenta con diversos sensores que tienen en cuenta estas variables, como es el caso de la melatonina, la hormona que regula el reloj biológico y que se encarga de informar del ritmo seguido a lo largo del día con el objetivo de regular el organismo.
Este sábado, los relojes tendrán que adaptarse al cambio de horario estacional, por lo que tendremos que atrasar una hora nuestros relojes.
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